La ruptura entre PP y Vox no afectará a la gobernabilidad

Lo ocurrido con el pacto entre el PP y Vox, que dio la Alcaldía de Roquetas a Gabriel Amat, no afectará a la gobernabilidad del municipio, al menos por el momento. Amat tiene todo a su favor en estos momentos para conservar una cómoda mayoría. Para empezar porque los dos exconcejales de Vox, Francisco Barrionuevo y Antonio López, han pasado a ser no adscritos y siguen formando parte del equipo de Gobierno. Es más, los dos han dado muestras de afinidad y sintonía con Amat, incluso mayores que la de algunos de los concejales del PP, por lo que salvo que se produzcan nuevos giros de los acontecimientos, ambos se mantendrán fieles al primer edil.

Hay que recordar que dos son precisamente los votos que Amat necesita para mantener su mayoría absoluta, tras unas elecciones que dieron al PP 11 concejales del total de 25 con que cuenta la Corporación municipal.

Pero la salida de los dos concejales de Vox también tiene otra implicación y es que su paso a ser concejales no adscritos ha cerrado la puerta a una moción de censura contra Amat, teniendo en cuenta que las leyes antitransfuguismo exigen un voto más por cada tránsfuga que apoyara la moción, para que esta prosperara.

Además de los dos exconcejales de Vox, en esta legislatura que apenas lleva unos meses andando, hay otro edil roquetero más que ha abandonado las filas por las que se presentó, pasando a ser no adscrito. Se trata de Lourdes García, número dos de Ciudadanos, que en el último pleno de este mismo mes abandonó su grupo. La concejal aún no ha dado muchas pistas sobre la actitud que tendrá con el PP de Amat y su voto que, mientras el alcalde conserve el apoyo de Barrionuevo y López no será decisivo, pero en caso de que alguno de ellos fallara, podría ser clave, sin necesidad de otros pactos con grupos.

Con tres no adscritos, que condicionan la gobernabilidad del municipio y hacen prácticamente imposible una moción de censura, no parece que se vayan a producir cambios importantes en lo que resta de mandato, que está marcado, una vez más por esta circunstancia.

Hay que recordar que ya la anterior legislatura estuvo marcada por el transfuguismo, tras la salida de la concejal del PSOE, María José López, cuyo voto fue decisivo para dar al PP una cómoda mayoría en el pleno.