Los padres pagaron 100 euros al falso médico, que habría realizado otras circuncisiones domésticas

En su versión de los hechos, ha informado que fueron los progenitores del bebé los que le contactaron para someterle a la circuncisión y él hizo «bien» dicho procedimiento. Es más, ha insistido en que los progenitores quedaron «contentos» y cuando se marchó del domicilio el menor se encontraba en «buen estado». Apunta a que, «no fue hasta más tarde», cuando comenzó «el sangrado persistente».

Por su parte, la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 7 de Roquetas de Mar ha puesto de manifiesto sus sospechas sobre dichas prácticas al apreciar un riesgo de «reiteración delictiva» y decreta para el falso curandero prisión provisional, comunicada y sin fianza por la presunta comisión de un delito de homicidio imprudente al considerar la posibilidad de que pueda volver a actuar.

Y es que en el registro domiciliario del presunto autor de la muerte del bebé, agentes de la Guardia Civil habrían hallado el material instrumental quirúrgico empleado para la circuncisión del menor en el domicilio de los progenitores, en la Avenida Cortijos de Marín, que, además, podría haber sido utilizado en otras ocasiones. Además, en su auto de ingreso en prisión, la jueza hace referencia a que es necesario «evitar que el detenido continúe con tales prácticas que ponen en serio peligro la vida de los menores» con consecuencias como las del menor de 40 días fallecido.

En dicho escrito, la juez no precisa aún cómo se produjeron los contactos previos entre la familia y el investigado así como tampoco el momento en el se produjo «sangrado persistente» del bebé, que le llevó a su fallecimiento sobre las 21.28 horas en las urgencias del centro de salud ubicado en la Avenida Reino de España de Roquetas de Mar.