Un grupo de pensionistas recoge 1.700 firmas para reclamar el bus urbano

Según aseguraron, la iniciativa nace de la «impotencia» por no poder recorrer el pueblo de forma sencilla, al carecer de medios necesarios para desplazarse. «Si quiero o necesito venir a Aguadulce tengo que esperar el autobús, que no se sabe cuándo pasará, tardando en muchísimas ocasiones más de una hora, y luego a la vuelta, subir otra cuesta porque no hay ningún bus que vaya donde vivo, en Aguadulce norte», explicó Marisa, una de las impulsoras.

Aseguran sentirse «sorprendidos» cuando al viajar a otras localidades similares como Fuengirola o Motril, se dispone de autobuses urbanos, mientras que «nosotros, con muchos más habitantes, tenemos que aguantarnos sin transporte», explicó a las puertas del Ayuntamiento Juan, otro de los mayores que han recogido firmas. Unas palabras apoyadas también por Rocío, que como sus compañeros reclamó el bus urbano y añadió que «lo peor es que nos digan que va a haber autobuses y pasan los años y años y nunca llegan. Algunos mayores se preguntan si llegarán a verlos».

Moción de IUTDEQ

La reclamación fue apoyada también esta semana por IUTDEQ, manteniendo una reunión con los mayores que han recogido las firmas la concejal Toñi Fernández, que presentó paralelamente una moción reclamando el bus urbano.

Fernández recordó que Roquetas debió haber puesto en marcha el servicio en 2002, es decir, hace casi 20 años, cuando se superaron los 50.000 habitantes, calificando el retraso de «injustificado».

La moción de IUTDEQ también reclama la mejora del actual proyecto de transporte urbano, aprobado en 2019 y que aún espera su puesta en marcha, en el que se previeron cuatro líneas, una principal entre Las Marinas y Aguadulce, que tendría su versión nocturna, así como tres líneas adicionales, una que recorrería Aguadulce, otra entre Roquetas y Cortijos de Marín y una tercera entre Roquetas y el Hospital/Estadio.

La formación aseguró que el proyecto previsto deja fuera lugares de interés, especialmente en Aguadulce, donde se mantendrían sin conexión colegios como el Sáiz Sanz, Trinidad Martínez, el pabellón Máximo Cuervo, el mercado, el cementerio, Las Colinas. Tampoco tendrían comunicación la Escuela de Música y el CDU de El Parador, centros educativos de Roquetas pueblo ni los juzgados, ni el barrio de Las Losas o las playas entre Aguadulce y La Romanilla. «Todos ellos, sin duda, lugares importantes que deberían cubrirse con transporte público», se asegura en la moción.

Por otro lado, la propuesta presentada también pide una modificación de los horarios, que en algunos casos tienen tiempos de espera de más de una hora, así como precios asequibles o gratuitos para jubilados o personas con bajos recursos. Hay que recordar, en este sentido, que el proyecto fue modificado tras su aprobación y, como ya informó IDEAL, se anunció la gratuidad del servicio para los pensionistas y una mejora en los horarios de las líneas secundarias.

Por último, IUTDEQ exigió que los autobuses que se usen para el futuro servicio urbano que se sigue esperando, sean eléctricos «para reducir la huella de carbono y dar ejemplo de movilidad sostenible», se concluyó desde esta formación.