Confirmado un caso de COVID-19 en la plantilla de la Policía Local de Roquetas

Así lo confirmaron a IDEAL ayer tres fuentes policiales diferentes, aunque desde el Ayuntamiento no se quiso ni confirmar ni desmentir, amparándose en una política de protección de datos. Además del agente, habría otros dos policías que tuvieron contacto con él caso confirmado, que se está a la espera de las pruebas para descartar o confirmar la infección.

El caso de la Policía Local roquetera es el primero conocido de contagio del COVID-19 en las fuerzas del orden en la provincia, cuyos integrantes están realizando un enorme esfuerzo para asegurar el cumplimiento de las medidas de confinamiento, bajo una enorme presión para reducir el riesgo de contagio, como confiesan muchos de ellos.

En Roquetas, aunque no se han dado datos de las medidas adoptadas, IDEAL sí ha podido confirmar que la Policía Local lleva desde que empezó la alarma sanitaria tomando numerosas precauciones para reducir al máximo el riesgo de contagio. Así, los vehículos son desinfectados diariamente con ozono y también se usa ozono para desinfectar la jefatura en cada cambio de turno, tres veces al día.

Además, hace unos días se clausuraron los vestuarios por parte del servicio de Prevención de Riesgos Laborales del Ayuntamiento de la localidad, dado que no reunían las condiciones adecuadas para evitar los contagios por su pequeño tamaño, teniendo en cuenta la necesidad de guardar las distancias.

Los agentes también tienen estrictos protocolos tanto a la hora de actuar y hacer intervenciones, como al llegar a sus viviendas, cambiándose a la entrada de las mismas, desinfectando toda la ropa, reduciendo el contacto con su familia e incluso, durmiendo en habitaciones diferentes si es posible. Medidas todas ellas similares a las que adoptan también otras profesiones de riesgo como el personal sanitario.

Aunque ya el material de prevención ha empezado a llegar, los primeros días del estado de alarma hubo problemas para tener guantes, mascarillas o soluciones de hidroalcohol, como también sufrieron otros cuerpos como la Policía Nacional y la Guardia Civil. Fueron comerciantes y particulares del municipio los que donaron gran cantidad de productos durante esos días y continúan colaborando de forma desinteresada.