Bandera negra de Ecologistas a la playa entre Roquetas y Aguadulce por los vertidos

La organización Ecologistas en Acción ha dado a conocer esta semana su informe del estado del litoral español, en el que se conceden las llamadas banderas negras con las que se quieren denunciar agresiones medioambientales en los 8.000 kilómetros de costa de nuestro país. En el caso de la provincia de Almería, este año se ha concedido una bandera negra al tramo de playa entre Roquetas y Aguadulce por la existencia de supuestos vertidos de aguas residuales que el Ayuntamiento niega y que la UE investiga, así como los vertidos de la Balsa del Sapo.

Ecologistas en Acción aseguró que precisamente son los vertidos de aguas residuales el mayor problema detectado un año más, por lo que «no podemos obviar la magnitud actual y continuada en esta situación».

En el caso concreto de los 8 kilómetros de playa roquetera afectados por esta problemática, se denuncia la existencia de «vertidos de aguas residuales y aguas de retorno agrícola (salobres y cargadas de nitritos y fosfatos) procedentes de la Balsa del Sapo, en una zona de gran valor ecológico».

En este tramo, se aseguró desde esta organización, existen tres emisarios submarinos en el Puerto Deportivo de Aguadulce, la Rambla de Las Hortichuelas y La Romanilla, a los que se sumaría el agua de la Balsa del Sapo que se vierte al mar desde 2013.

Ambos vertidos, denunció el informe, producen turbidez y variaciones en la salinidad, así como una alta carga orgánica que asfixia y envejece las praderas de posidonia. «En los análisis realizados en los estudios de Posimed los últimos años se dan valores elevados en las tasas de mortandad, semejantes a los que se dan en zonas donde existen piscifactorías, y lamentablemente, año tras año siguen en aumento. Probablemente la causa sea la presión por estos vertidos», afirmó Ecologistas en Acción en su informe anual.

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