Arrancan las obras de la «renaturalización» de la rambla de San Antonio de Aguadulce

La actuación viene generando controversia desde que se diera a conocer, dado el emblemático lugar que supone la rambla de San Antonio, un pulmón verde en pleno centro de Aguadulce, que en su día incluso llegó a contar con grandes praderas de césped y cuyo mal estado y suciedad eran objeto de numerosas quejas. En la remodelación de la rambla el Ayuntamiento ha optado por un proyecto similar al del Parque de Los Bajos en el que abundan las grandes explanadas de hormigón como elemento con el que el Ayuntamiento quiere favorecer un uso de ocio, según se ha venido insistiendo.

Sin embargo, el gran uso del hormigón como superficie predominante, ha generado muchas quejas de organizaciones ecologistas y oposición que insisten en reclamar espacios naturales con grandes zonas verdes, manteniendo los árboles y la vegetación existente y potenciándola con más plantaciones para que sea un espacio que pueda ser disfrutado durante todo el año, incluyendo también los calurosos meses de verano.

El proyecto se ha dividido en tres tramos adaptando las actuaciones a la anchura y orografía del cauce, si bien desde el Ayuntamiento se asegura que se preservará la mayor parte de la masa vegetal existente en esta rambla actualmente.