Amat recorta los recursos de la oposición mientras sube los sueldos un 36%

Así, los concejales se aprobaron una importante subida en sus sueldos, que supone una media del 36 por ciento más de lo que venían cobrando hasta ahora, además de aumentar el número de liberados, lo que llevará a aumentar la partida de sueldos de cargos electos de 663.815 euros anuales a 1.045.500 euros.

Sin embargo, en el reparto hay ganadores y perdedores, ya que de los 15 concejales que como máximo se pueden liberar con dedicación exclusiva en el Ayuntamiento, 11 corresponden al PP, más otros 2 a sus socios de Gobierno de VOX, quedando únicamente 2 concejales más liberados, uno para el PSOE y otro para Ciudadanos. Un reparto que deja fuera a Izquierda Unida-Tú Decides-Equo, que pierde la liberación que tenía y no podrá contar con ningún concejal dedicado plenamente a labores de oposición.

En cuanto a las remuneraciones, el alcalde, Gabriel Amat, pasa de cobrar 62.160 euros brutos anuales a percibir 79.500, mientras que el primer y segundo tenientes de alcalde, es decir, José Juan Rodríguez y Francisco Gutiérrez, pasarán de recibir 51.630 euros a cobrar 63.000.

El resto de tenientes de alcalde y delegados, así como los dos portavoces de PSOE y Ciudadanos, pasarán de ganar 41.300 a cobrar 56.000 euros brutos al año. El PSOE tenía en la anterior legislatura dos concejales con dedicación exclusiva, por lo que pierde uno, mientras que Ciudadanos tenía uno de dedicación exclusiva y un segundo con una dedicación parcial al 75%. En el caso de las dedicaciones parciales quedan por asignar, puesto que no se ha aclarado cómo se repartirán, posiblemente por ser una baza de negociación que se reserva Gabriel Amat, cuatro liberaciones parciales con un sueldo de 42.000 euros.

El asunto motivó debate, aunque fue una sesión atípica, ya que ni VOX ni Ciudadanos llegaron a pronunciarse sobre ningún asunto. Sí intervinieron el PSOE y, sobre todo IU-TD-E, que son los que salen peor parados del reparto de recursos en esta ocasión, y que fueron los más beligerantes en el asunto, siendo los únicos que votaron en contra.

El portavoz de la confluencia de izquierdas, Juan Pablo Yakubiuk, dijo entender las dedicaciones del equipo de Gobierno dadas sus funciones y responsabilidades, pero también defendió que el reparto de recursos sea proporcional a los votos de los ciudadanos. Por ello, vio «agravios comparativos», teniendo en cuenta que se liberan los 13 concejales del equipo de Gobierno y única 2 de la oposición. En su caso, que no tendrán ninguno «nos asiste este derecho, es un agravio para las 2.300 personas que nos han votado (el PP tuvo 10.500 votos) y para todos los vecinos que pagan con sus impuestos para tener una oposición que fiscalice y haga sus propuestas». Para el edil, la propuesta «raya el escándalo» y pidió al alcalde que rectificara, además de considerar «injustificable» el aumento de los salarios.

Desde el equipo de Gobierno el primero en responder fue el portavoz popular José Juan Rodríguez, quien aseguró que los salarios se han ido recortando en los últimos años y estaban por debajo de municipios de menos de 20.000 habitantes, situándose en la media de los de su tamaño «e incluso por debajo de municipios con la mitad de vecinos».

Rodríguez defendió la necesidad de que la labor de gobierno tenga dedicación plena y sobre la falta de liberaciones de IU-TD-E recomendó «asumir la responsabilidad» de las pasadas elecciones, siendo el único grupo de la nueva Corporación que ha perdido apoyos con respecto al anterior mandato. El portavoz popular dijo que el equipo de Gobierno entiende que esa labor de fiscalizar, que dijo respetar, corresponde ahora a PSOE y Ciudadanos. Algo que Juan Pablo Yakubiuk calificó de «muy grave» ya que «esa función recae en toda la oposición; le pese a quien le pese somos representantes de los vecinos».

También intervino el portavoz socialista, Manolo García, para denunciar que su partido ha perdido una dedicación y asegurar que no existe proporcionalidad en el reparto de los recursos cuando el PP con 10.500 votos consigue 11 y VOX con 3.600 tiene dos, mientras el PSOE con 6.500 votos se queda con una. «No hay proporcionalidad, se ha quedado con toda la tarta, señor Amat».

Amat zanjó la cuestión asegurando que los que se quedan sin dedicación cobrarán por la asistencia a plenos y comisiones «usted no está aquí de balde», aseguró tras afirmar que desde IU-TD-E pueden hacer el trabajo de oposición pese a no tener liberaciones. Amat también habló de los sueldos, explicando que el Ayuntamiento de Roquetas ha tenido tradicionalmente unos sueldos más bajos de lo habitual en municipios de su tamaño e incluso más pequeños.

Asesores

Debate también hubo con los asesores, donde el equipo de Gobierno nuevamente apura el máximo permitido por la ley, con 25 personas de confianza, de las que 22 se quedarían PP-VOX, dejando un único asesor para PSOE, Ciudadanos y, esta vez sí, IU-TD-E.

El portavoz socialista, Manolo García, aseguró que en este caso se da mayor desproporción aún que en el caso de los concejales liberados. Una «falta de equidad» que según denunció también se refleja en el traslado de los despachos de la oposición, actualmente en la primera planta, al igual que Alcaldía, para pasar «al sótano, donde no hay visibilidad», lo que llevó a García a considerar que el nuevo Gobierno de Gabriel Amat «ha empeorado las condiciones de los grupos municipales» y recordar que «las formas en democracia son el fondo».

Desde la formación de izquierdas se consideró «desproporcionada» la designación de cargos de confianza y se recordó que la figura del asesor presta una labor de apoyo político, por lo que en opinión de Juan Pablo Yakubiuk, muchos de esos puestos se pueden llevar a cabo desde las áreas municipales. «Es una administración paralela por el tamaño», dijo.

Las intervenciones de PSOE e IU-TD-E fueron respondidas por José Juan Rodríguez, quien puntualizó que el reparto de estos puestos de confianza no están regulados por ninguna normativa y son una discrecionalidad del alcalde.

Por su parte, Gabriel Amat intervino para atacar a IU-TD-E, reconociendo que efectivamente existe desproporcionalidad en reparto, ya que en su opinión el Partido Socialista debería tener dos asesores y la coalición de izquierdas debería quedarse sin ninguno.