Unos padres dejan a su bebé de tres meses en un vehículo al aire libre y se van a comprar a un centro comercial

La actuación de la Guardia Civil tuvo lugar sobre las 10,45 horas de ayer, cuando una patrulla circulaba por la carretera de Alicún y fueron requeridos por el vigilante de seguridad de uno de los comercios allí ubicados. El responsable de seguridad informó a los agentes de la presencia de un bebé de pocos meses que se encontraba solo en el interior de un vehículo estacionado en los aparcamientos al aire libre.

Los agentes de la Guardia Civil llegaron rápidamente al lugar, comprobando como el vehículo tenía las dos ventanillas delanteras con una pequeña apertura para que entrara el aire al interior, donde se encontraba un bebé, de pocos meses, el cual aparentemente se encontraba en buen estado, si bien mostró signos de sudor por la cara y frente.

Ante esta delicada situación y tras conocer que el bebé puede llevar en el interior unos 20 minutos con la respectiva ausencia de los padres que pudieran abrir el vehículo, los agentes de la Guardia Civil trataron de abrir el mismo.

Para ello, uno de los agentes introdujo el brazo por una de las ranuras de las ventanillas delanteras, no sin esfuerzo, llegando a arañarse el mismo dado la estrechez de la ranura.

Finalmente el agente de la Guardia Civil consiguió abrir la puerta delantera y posteriormente la puerta trasera en la que se encontraba el bebé, sacándolo del interior, comprobando que se encontraba llorando y acalorado, pero en perfecto estado.

Minutos más tarde llegaron al lugar los padres del bebé, quienes junto con los agentes de la Guardia Civil se trasladaron hasta dependencias de la Guardia Civil de Roquetas de Mar para el esclarecimiento de los hechos. Los progenitores relataron que habían entrado a comprar, dejando al bebé en el interior del vehículo al encontrarse en ese momento dormido.