Eugenio Sánchez: El IBI ni baja, ni sube, ni todo lo contrario

 

Resulta que con la revisión catastral promovida recientemente por el Gobierno, el IBI va a subir considerablemente este año y durante los diez siguientes. Esto se une a un dato que desconocía: el coeficiente del IBI de Roquetas de Mar es el más alto de la provincia de Almería. Es el doble que el de la capital y uno de los más altos de Andalucía. En ese contexto, una bajada del 9% es del todo insuficiente. Sin contar con que, en mi opinión, los roqueteros hemos estado años pagando dinero de más por el IBI.

La corporación municipal del Ayuntamiento de Roquetas, a pesar de lo que sostiene la oposición, ha realizado una buena gestión económica a lo largo de los últimos 17 años. Gracias a esto, Roquetas se encuentra en una buena posición en el mapa de la deuda municipal en España. El año 2011 se cerró con un superávit de 1.3 millones de euros y se está haciendo un gran esfuerzo para adaptar los gastos municipales a la reducción de ingresos que se ha producido en los últimos años en las arcas roqueteras. Pero hay cosas que se pueden mejorar, y una de ellas es el IBI. No es de recibo que tengamos un coeficiente tan alto. Ya he dicho antes que el coeficiente de Almería capital es la mitad, y no creo que esto suponga que en Almería tengan la mitad de servicios que en Roquetas.

El roquetero medio está harto de que suba todo menos los sueldos. Sube la gasolina, sube la electricidad, suben los impuestos a nivel nacional y autonómico. Y con cada una de estas subidas lo que baja es nuestra calidad de vida. Y lo más frustrante es que parece que no podemos hacer nada para evitarlo, que lo único que nos queda es el pataleo. Pues yo, como no me queda más remedio, pagaré el IBI religiosamente, pero por lo menos voy a patalear. Voy a decir alto y claro que no me gusta que los roqueteros tengamos, con diferencia, el IBI más alto de la provincia.