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Amat asegura que la variante se ha parado porque no se paga a la empresa

Las recientes declaraciones del delegado de Obras Públicas de la Junta de Andalucía, José Manuel Ortiz, en las que aseguraba que la variante de Roquetas está parada porque aún no se dispone de todos los terrenos que debe poner a disposición de la Junta el Ayuntamiento de Roquetas, han despertado gran malestar en el Consistorio. El alcalde, Gabriel Amat, aseguraba en un reciente encuentro vecinal que la razón fundamental de la paralización es que «la Junta no tiene como pagar a la empresa concesionaria, a la cual debe, según me han comunicado extraoficialmente en torno a 10 millones de euros».

Julio Valdivia

Martes, 10 de mayo 2016, 10:49

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El primer edil, que aseguró no haber querido mencionar la variante en la campaña electoral «para no confundir», pero sí quiso responder las declaraciones del delegado que «no son ciertas, por lo que me veo obligado a contarles la verdad a los vecinos» y recordó que la primera fase, hasta el centro comercial Gran Plaza, está completamente despejada y no tiene ningún impedimento para terminarse, como así se acordó el año pasado en la Comisión de Seguimiento de las obras de la variante.

Como se recordará, hace un mes que IDEAL adelantó que la Junta paralizaba todas sus obras públicas en la provincia, viéndose afectada, entre otras, la variante de Roquetas. La carretera, que lleva ya varios meses de retraso y cuya apertura aún no tiene fecha, se encuentra desde entonces parada.

La noticia generó gran malestar en el municipio, ante la paralización de una vía que es considerada fundamental para comunicar las urbanizaciones turísticas con la Autovía del Mediterráneo, y que serviría para descongestionar los núcleos urbanos del municipio, que actualmente sufren un intenso tráfico.

El tramo entre la carretera de Las Losas y el centro comercial Gran Plaza, se encontraba muy avanzado y estaba previsto que pudiera abrirse para esta Semana Santa, pero la paralización de la obra ha hecho que aún no se haya podido concluir.

En cuanto al segundo tramo, sí tiene problemas para la consecución de los terrenos por parte del Ayuntamiento, ya que aún queda una media docena de parcelas cuyos propietarios no aceptan las compensaciones urbanísticas propuestas.

 

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